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Gijon, Asturias, Spain

MAPA

ALGARVE Y SUR DE PORTUGAL



Nos vamos 10 días por Portugal, entrando por Lisboa y saliendo por Faro.

Día 15.06.18 GIJON-LISBOA

Vuelo directo desde Asturias a Lisboa, eso sí, llegando con dos horas de retraso. Allí ya está Karma esperándome. Besos, abrazos, que delgada estás, tu más….. y vamos a recoger el coche que ya teníamos alquilado, mientras llegan Pili y Marta de Madrid, que también llegan con mucho retraso.

Marta y yo, cada uno en su respectivo aeropuerto, aliviando el retraso




Llegan, otra vez besos, abrazos, que delgada estás, tu más,……. Y salimos en dirección de Alamada, ya que tenemos allí el alojamiento (HOSTEL Almada - Pousada de Juventude)

Decidimos pillar algo a las afueras y ya rumbo al sur, mejor que en Lisboa que ya lo conocemos todos. Es un apartamento que no está mal por 66 € con desayuno
Llegamos sobre las 3 de la mañana y casi directos para la cama.

Día 16.06.18 LISBOA-SETUBAL

El desayuno no es gran cosa, pero nos quita la gusa de la mañana. Las vistas del Tajo, en cambio, nos quitan el aliento. Hace un día claro y soleado ¡ya teníamos todos ganas de sol y calor!



A las 11.00 nos vamos hacia costa Caparica, un pueblo con playas inmensas y muy turístico. Hay muchas olas y muchos surferos. Buen primer contacto con las playas.





Seguimos ruta y paramos en un Lidl a hacer comprita para pic nic: agua, cerveza, pan, embutidos, queso y una neverita portátil que nos acompañará en todo momento.
Nuestra siguiente parada es Lagoa de Albufeira: es una laguna que llega hasta el mar. Hace un poco de viento, pero se está bien. Tomamos un café en un chiringuito y vemos un poco la playa, ya de cara al mar.



Después vamos a Cabo Espichel, con sus acantilados, una ermita… y mucho viento. 







Solo damos un paseo y seguimos hacia Sesimbra. Subimos en coche al Castelo, que es gratis y tiene buenas vistas, aunque en sí no es muy majo. Damos un paseo por el pueblo, por el paseo marítimo, una playa muy bonita y muchos bares y restaurantes.










Miramos para dormir aquí pero todos los alojamientos que quedan libres son muy caros. Finalmente reservamos un apartamento en Setúbal. Esta vez, igual que nos pasó en Holanda, el dueño cancela la reserva y nos ponemos en contacto con booking.com. Nos lo solucionan muy rápido y reservamos una habitación para cuatro, con cuatro camas individuales en el Montado Hotel & Golf Resort, Urbanização do Campo de Golfe do Montado, Lote 1, 2950-051 Palmela. Si el primer apartamento nos costaba 95 Euros, este nos cuesta 180, por lo que booking.com nos va a devolver 85 Euros. Desayuno incluido.

Nos vamos a Setúbal. No nos parece muy bonito y la zona de restaurantes parece más de mercado (a estas horas ya todo cerrado) y portuaria, pero aquí nos quedamos. Vemos un restaurante de Rodizio de pescado: un menú con varios pescados, entrantes y ensaladas. No tiene mala pinta (y está bastante lleno), pero nos vamos a ver otros, que están un poco más lejos. Hay cinco o seis juntos y nos decidimos por O Miguel (Av. Jose Mourinho 16-18), y cenamos almejas, gambas al aljilho, bacalao (no estaba muy rico, qué pena para ser la primera noche) y sargo, con dos botellas de vino blanco Periquita. Total: 113 Euros.

Volvemos al hotel, que está sólo a unos 20 minutos, pero nos parece lejísimos. En el hotel acaban dándonos dos habitaciones. Y a dormir, que estamos cansados.

Día  17.06.18 SETUBAL-VILANOVA DE MILFONTES

Por la mañana apreciamos bien el pedazo de hotel y los campos de golf. También hay piscina, pero es pequeña e interior. El desayuno es fantástico.

Sobre las 10.30 salimos hacia el puerto de Setúbal para contratar una excursión para ver los delfines en el estuario del río Sado.

Preguntamos en la Oficina de Turismo y una chica muy dispuesta nos da todo tipo de explicaciones, pero resulta que las excursiones salen a las 11.00 y ya no hay tiempo o a las 14.30, y ya es muy tarde porque queremos salir antes de ruta. Justo en frente de la Oficina de Turismo hay una caseta de Rotas do Sal (rotasdosal.pt) y ellos nos apañan una lancha para nosotros solos para salir a las 12.30. La excursión dura 2 horas y cuesta 35 Euros por persona.

Como tenemos tiempo, hasta la salida del barco, subimos al Castelo de San Felipe. Es gratis y lo mejor son las vistas.



Un poco pasadas las 12.30 subimos a la barca. Nos acompañan el capitán y una chica de la agencia que nos explica que hay una treintena de delfines en el estuario, están protegidos y no se puede ni nadar con ellos ni acercarse con la barca a menos de 50 metros. Eso quiere decir que los vemos un poco de lejos, pero los divisamos bien porque son muy grandes. Hay una barca cerca que está volando un dron. Nuestro patrón les riñe porque no están permitidos los drones sobre los delfines.





Después seguimos navegando por la Península de Arrábida y vemos las playas de Figueirinha, Praia dos Galapos, Praia dos Galapinhos (declarada mejor playa de Europa en 2017), Portinho da Arrábida, y otras… En frente de una de ellas, paramos y nos damos nuestro primer baño ¡Fantástico!!! El agua es muy clara, fresquina y estamos lejos de la playa, pero el agua no cubre; es una lengua de arena y la marea está baja. Estamos contentísimos y solo sentimos no tener nuestra nueva nevera repleta de cervezas heladas para acompañar el momento.






Al terminar el tour corremos al coche para coger el ferry (altanticferri.pt) que nos llevará a la península de Tróia, lo que nos ahorra bastante trozo de carretera en nuestro viaje hacia el sur.

Por el coche y cuatro pasajeros nos cobran 27,30 Euros, solo ida. Tardamos menos de media hora y vamos en busca de una playa donde hacer nuestro pic nic. Tardamos un rato porque todas parecen estar bastante lejos de la carretera.

Queremos quedarnos en la playa de Compuerta, pero nos parece que está muy llena de gente. Paramos en la Praia de Carvalhal. Hay bastante gente, pero no está abarrotada. Hay un aparcamiento que cuesta 5 Euros.




Tras comida, siesta y cafetín, nos vamos a Sines, lugar de nacimiento de Vasco de Gama. Solo damos un paseo, es bastante industrial pero por el interior del pueblo hay algunas callejuelas estrechas y casas bonitas.






Nuestro destino final hoy, donde dormiremos es Vilanova de Milfontes, donde hemos alquilado un apartamento: Born to Stay In Milfontes, Rua Custodio Bras Pacheco, 3. La recepción es la tienda de recuerdos justo al lado y el chico, muy amable, nos indica dónde comer pescado bueno y barato.

Bajamos toda la calle hasta el puerto y cenamos en el restaurante Fateixa: pulpo el tiborna (con patatas, ajo, aceite…), dos brochetas enormes de gambas y calamares y sardinas asadas, más dos botellas de vino blanco de la casa: 70 Euros. Estaba todo buenísimo.




Al lado de casa, tomamos un gin tonic en el Blue (unos 7 euros cada uno) y ¡a dormir!

Día 18.06.18 VILANOVA DE MILFONTES-ARRIFANA

Sobre las 11.00 salimos hacia la Praia de Funes, al otro lado del río Mira. La playa es muy grande, a orillas del río que acaba desembocando en el Atlántico. Solo damos un paseo






y seguimos hacia Almograve: acantilados que recuerdan a los flysch de Zumaia. No hace mucho sol, hace una temperatura agradable.






Seguimos hacia el Cabo de Sardao, con su faro y unos acantilados impresionantes.





Hoy nos toca pic nic en la Praia de Zambujeira do Mar, un pueblo también muy turístico y una playa no muy larga pero sí muy ancha porque la marea está baja. El agua sigue fresquita, como se nota que estamos en el Atlántico.

Tomamos un café en el pueblo y seguimos hacia Aljezur, donde visitamos el Castelo. Unas vistas muy bonitas.




La siguiente parada es la Praia de Amoreira, a la que también llega un río.

La Praia de Monte Clérigo, muy cerca de la anterior es otra playa surfera con viento, olas...



Nos vamos a Arrifana y aquí decidimos quedarnos a dormir: en el Destination Arrifana Hostel. Habitación cuádruple (dos literas) con baño y desayuno incluido: 84 euros. Tiene vistas al mar, aunque la carretera está en medio.

Hemos estado en la Punta de Arrifana, donde se encuentra el restaurante O Paulo, con una terraza muy bonita y con vistas al mar. Pensamos cenar allí, pero la chica del hostel nos dice que el restaurante Océano es mejor, así que nos tomamos una cerveza en uno de los muchos bares que hay a lo largo de la carretera y después cenamos en el Océano a base de pescado: mejillones con nata, gambas al ajilho, bacalao al grill y caldeirada (cataplana de pescado). Con dos botellas de vino blanco, 107,50 Euros. Todo riquísimo y abundante.






Tomamos un g&t en el hostel (uno para los cuatro!!!). Pago yo J.

Día 19.06.18 ARRIFANA-CARVOEIRO

Desayuno espectacular de vistas, pero regular de contenido.

Hoy entramos en la Costa Vicentina, que empieza en Ocedeixe y se extiende casi hasta el Cabo de San Vicente.

Salimos a las 10.00 hacia Bordeira. Hoy es buen día para los surferos porque hace sol y viento. Ideal también para quemarse la piel.

La Praia de Bordeira es muy amplia, el mar está preparado para recibir surferos, que van llegando poco a poco.






La siguiente parada es la Punta de Carrapateira. Seguimos en un paisaje de acantilados impresionantes y playas amplias. Olas y más olas.






La siguiente playa es la Praia do Amado. Más acantilados, olas y pasarelas que pretenden que los peatones no pisen la vegetación, para preservarla.




El siguiente pueblo es Villa do Bispo, donde paramos a hacer un poco de compra.

Nos vamos al Cabo de San Vicente, que es un sitio magnífico para ver la puesta de sol, pero hoy no parece que vaya a verse, y además es muy pronto para quedarse por aquí, ya que hoy dormimos en Carvoeiro.

El Cabo de San Vicente es el extremo más suroccidental de la Península Ibérica. Acantilados magníficos, un faro y mucha gente.

Nos vamos a la Praia da Mareta a hacer nuestro pic nic. Está en Sagres, que visitamos después de comer y tomarnos un café. Lo más emblemático es su Fortaleza. No entramos porque, según las guías, no vale la pena entrar. Cuesta 3 Euros. Lo que sí merece la pena son los acantilados que la rodean.

Y ya ponemos rumbo a nuestro apartamento, que será nuestro hogar en los próximos días. Está en Monte Carvoeiro C46, Ru do Paraíso, Praia do Carvoeiro, 8400-558 Lagoa, en Carvoeiro. Vamos a pasar aquí cinco noches y hemos pagado 157 Euros por persona a través de Airbnb.





Vamos a pie a un super Coviran, que está bien para una emergencia o poca cosa porque es un poco caro, pero ya haremos compra gorda mañana con el coche.

Duchita refrescante y nos vamos al pueblo a tomar una cerveza. Estamos allí en menos de diez minutos, pero todo cuesta abajo, lo que quiere decir que a la vuelta es… ¡cuesta arriba!!!

Después de cuatro canecas y dos cañas (20 Euros) nos vamos a cenar a Jota Lita, muy recomendado: almejas, sardinas, lubina y gambas gabardina. Con vino blanco y un postre de almendras y algarrobas: 73 Euros.

Subimos la cuesta hasta casa y nos paramos al lado de casa, donde hay una plaza con muchos bares y restaurantes. Nos tomamos un gintonic: 41 Euros (van de 8 a 13 Euros cada uno), eso sí, todos de ginebras pijas por eso son tan caros.

Día 20.06.18 CARVOEIRO

Día nublado. Decidimos no hacer playa o esperar a ver si abre. Nos vamos al interior, a la montaña.

La primera parada es Alcantarilha, donde hay una de las seis Capelas dos Ossos que hay en Portugal. Es muy pequeña, pero está repleta. Da un poco de repelús.

La segunda parada es Silves, cuya principal atracción es el Castelo (2,90 Euros la entrada simple, sin incluir el museo arqueológico), y que visitamos y la Sé, la Catedral, que no visitamos. 







Callejeamos un poco por el pueblo. Llueve un poco y hay mucha gente, suponemos que, como nosotros han decidido no ir a la playa y hacer algo más cultural.

Vamos en coche al Mirador de la Sierra de Monchique (Pico de Foia), pero no se ve NADA, está completamente nublado.

Vamos bajando y buscando un restaurante donde comer. Paramos en A Rampa, y comemos ensalada de tomate (buenísimo), bacalao a Rampa (frito, con un sofrito, cebolla y patatas fritas), pollo piri piri y pluma (cerdo) y un vino del Alentejo muy fuerte. Todo está muy rico y nos cuesta 52,70 Euros.

Estamos muy cerca de Caldas de Monchique, conocida por su estación termal, pero no paramos. En Monchique sí paramos y damos un paseo. Un pueblo bonito, sin más.




Nos vamos a Portimao para informarnos sobre la excursión que queremos hacer el sábado: es una excursión en barco para ver las cuevas del Algarve, comer en una playa (comida incluida). De las 10.00 a la 18.00, y cuesta 70 euros por persona.  Lo único que aclaramos es que efectivamente sale el sábado y que podemos reservar on line (¡ojo! El sistema de reserva solo admite PayPal como método de pago!).

Vamos a la Praia de la Rocha, en Lagos. Damos un paseo por la playa y luego por el pueblo. Llueve un rato, pero para enseguida.





Nos vamos a Ferragudo, a orillas del río Arade a tomar una cerveza. Aprovechamos para reservar mesa en el restaurante A Ría, para comer una cataplana de marisco el sábado.



Como hemos comido mucho y estamos un poco cansados de comer fuera, vamos a casa a cenar. Compramos pan y algo dulce, y ya está.

Día 21.06.18 CARVOEIRO

Hoy nos vamos a Tavira. Aparcamos en el Casi de Quatro Aguas y cogemos un pequeño ferry a la Ilha de Tavira. A diez minutos a pie está la playa del mismo nombre, donde nos bañamos, tomamos unas cervezas y disfrutamos del sol. El ferry tarda unos diez minutos en cruzar (hay otro puerto, un poco más alejado, que tarda más tiempo).

Cogemos el ferry de vuelta a las 13.20 ya que hemos reservado mesa en el restaurante Piteu da Baixa Mar, en Olhao para comer arroz con marisco.
Pedimos un mix de navajas y almejas de entrante, vino blanco y una ración de arroz para dos que da para cuatro.





Después de comer damos un paseo de dos horas en barca (10 euros por persona) a la Isla de Culatra. Como no nos gusta, nos lleva a otra playa, más bonita. Hay muchos puestecillos en el paseo que ofrecen excursiones en barca de todo tipo y precio.







La siguiente visita es Faro. Damos un paseo por el pueblo. Muy bonito.








Pasamos por el supermercado a hacer un poco de compra y cenamos en casa.

Día 22.06.18 CARVOEIRO

Después del suculento desayuno que nos solemos preparar, vamos a Lagos, a Ponta de Piedade.




 Son los acantilados más bonitos del Algarve.





Cogemos una barca que por 20 Euros nos da un paseo de media hora por las cuevas. Es una pasada, aunque hay mucha gente, tanto en barcas con motor como en kayak. Nos gusta mucho la excursión, vale la pena.

















Después volvemos a Carvoeiro, a la Praia da Marinha. Es muy bonita: rodeada de acantilados, aunque, como todas las playas de este tipo, tiene una escalera de 100 escalones que hay que tomarse con calma a la subida.



Tomamos café en un chiringuito y volvemos a casa. Marta se queda a disfrutar del jardín. El resto nos vamos a la Praia do Paraíso, a cinco minutos andando. Es preciosa pero al estar la marea baja no te puedes bañar y hay mucha roca, así que decidimos ir a la principal de Carvoeiro.



Después tomamos una cerveza en el pueblo y en cenamos en Martins: sardinas grilhadas, bacalhao a braz, pulpo y brocheta de salmón y gambas. Dos botellas de vino blanco y postre: 92,30 Euros.

Volvemos a casa y nos paramos en la plaza a tomar un gin tonic (26,80 Europa). Nos sorprende que haya poco movimiento en viernes por la noche.

Día 23.06.18 CARVOEIRO

A las 9.15 ya estamos en Portimao, en el puerto esperando embarcar en el “Santa Bernarda”, el barco pirata que nos llevará por la costa del Algarve. Hace un sol de justicia y sacamos la crema solar pensando en la navegación que nos espera.







Sin embargo, al cabo de pocos minutos de salir, se cierne sobre nosotros una espesa niebla que ¡ríete del “holandés errante”! Nos dice un verdadero holandés que trabajo en el barco que en ocho meses que está en Portugal nunca había visto nada igual.
O sea, que en todo el viaje de ida no vemos nada…

La niebla empieza a despejarse cuando llegamos a Benagil. 





Allí cogemos botes más pequeños y visitamos las cuevas más de cerca y por fuera. La más bonita, la de Benagil, aunque a decir verdad, el barquero iba muy rápido y casi no daba ni tiempo de fotografiar las cuevas, ya ni te digo disfrutarlas… lo ideal sería ir en un barquito privado o aún mejor, en un kayak.








Muy cerca hay una playa a la que solo se puede acceder por mar, 




y allí nos preparan una barbacoa estupenda a base de sardinas, pollo, brochetas de carne y salchichas, acompañado de ensalada y patatas y de postre, fruta. Bebidas sin alcohol y vino están incluidas, pero no cerveza, así que nosotros nos vamos con nuestra inseparable neverita. También han puesto parasoles, por lo que hay un poco de sombra.




Sobre las 14.30 volvemos al barco y vamos, a motor hacia Alvor, viendo las playas, cuevas y acantilados de Algar Seco, Carvoeiro, Praia da Rocha (Lagos), Praia dos Tres Irmaos, Praia da Batata, Praia Dona Ana, Ponta da Piedade… y aquí izan las velas para volver hasta Portimao sin motor. Pero como hace poco viento, tienen que volver a poner la carabela a motor.
La animación en el barco es de piratas, claro: un marinero, vestido de negro y con el imprescindible pañuelo atado a la cabeza se viste de pirata (con gorro, greñas, espada y pistola) e increpa a los incautos pasajeros de los otros barcos, que responden, casi siempre, desafiantes. Es un tipo muy gracioso y amigable. A la hora de navegar a vela hay un intento de que el público (nosotros) cantemos, pero parece que no somos un grupo muy cantarín y al final desisten.
















Esta es la playa de Carvoeiro vista desde el mar



Llegamos a las seis y nos vamos a casa. Llegamos en menos de media hora y a las ocho y poco ya estamos en Ferragudo, tomando la cerveza de antes de la cena.

A las nueve vamos al restaurante y tenemos reservada una mesa fuera. Hoy es nuestra última cena juntos en el Algarve, ya que Marta y Pili se van mañana. Karma y yo todavía nos quedamos un par de días mas.

No hay mucha gente. Pedimos entrantes: almejas (buenísimas), pulpo, gambas al ajillo y la cataplana, que también está estupenda. Vino blanco y un postrecito.






Día 24.06.18 CARVOEIRO-FUSETA

A las 9.00 dejamos el apartamento y llevamos a Pili y a Marta al aeropuerto, ya que ellas se vuelven hoy. Nos despedimos hasta el siguiente viaje que espero sea pronto.
Karma y yo seguimos rumbo hacia Ollao, ya que queremos hacer un tour por la Ría de Formosa. Los tours suelen ser de unas 6 horas.
Hay muchas agencias que lo venden, pero al final nos decidimos por una que salía en 10 minutos, además solo vamos 6 personas, nosotros y cuatro franceses que resultaron ser muy majos.

Primero fuimos a la playa de Armona, luego al pueblo de Culatra donde comimos pescado regado con una botellita de vino.



Después de comer, dimos un paseo por el pueblo, aunque tampoco es nada del otro mundo.






Luego playa de Faro donde echamos una pequeña siesta. Luego a playa desierta, que no era muy bonita ya que estaba la marea baja y no había agua para bañarse.

Volvimos sobre las 7 a Ollao. La verdad es que estuvo muy bonito, merece la pena hacerlo. También tuvimos suerte, ya que normalmente en los barcos van entre 20 y 25 personas y nosotros éramos solo 6, así que estupendo.



Llegamos y vamos para Fuseta, que es donde hemos reservado apartamento para las dos noches que nos quedan. Duchita y salimos a cenar pescadito a una terraza que tenemos al lado de casa.

Día 25.06.18 FUSETA

Desayuno tranquilo en la terraza



Y decidimos que vamos a una islita de enfrente a pasar el día. Tenemos que coger un taxi-bote, que nos lleva hasta allí y a la hora convenida nos recoge. Nos cobra 30 euros por los dos.

Pasamos aquí todo el día hasta las 5 que nos vienen a recoger.





Nos pegamos una duchita y nos vamos a Tavira a cenar y conocer el pueblo. Por cierto muy bonito.















Cenamos en una terraza, nuestro último bacalao en este viaje, y volvemos a Fuseta. Tomamos el gin-tonic de rigor debajo de casa y para la camina.

Día 26.06.18 FARO-LISBOA-GIJON

Sobre las 9 vamos para el aeropuerto, ya que mi vuelo sale a las 11:30 y el de Karma directa a Barcelona a las 11.
Nos despedimos y cada uno para su casa
Yo voy vía Lisboa, pero solo estoy un par de horas de tránsito y por suerte en esta ocasión todos los vuelos salen en hora, así que sobre las 19:00 estoy en casita

El viaje precioso como suele ser habitual, llevaba mucho tiempo con ganas de conocer el Algarve y por fin. Hay sitios espectaculares, pero claro, tampoco dió tiempo a todo, pero bueno, espero que haya una segunda vez.
De la compañía no digo nada porque si no, no seguiría viajando con ellas. Gracias churris por el estupendo viaje y hasta la próxima.


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